Además de lo precioso que es el Cachorro y lo que me gusta verlo, me parece precioso el cartel. A diferencia de los carteles decimonónicos que se suelen hacer (baste el cartel oficial de estas fiestas de primavera nuestras), es una composición preciosa de la realidad del mundo en la silueta de la cara del Cristo. Muy, muy bonito. Un abrazo.
Gracias Opinador. Coincido contigo. La verdad es que esta ha sido la entrada más rápida que hecho desde que tengo el blog. He estado un tanto apurado de tiempo durante los últimos días y no he podido siquiera presentar ni comentar el cartel. Para mi gusto es muy original y rompe con el estereotipo religioso que se utiliza en Sevilla. Un abrazo.
América, la imagen del Cachorro es un prodigio del Barroco español, pero, visto así, sugiere muchísimo más: la religiosidad y la realidad unidas. Un beso grandote
Además de lo precioso que es el Cachorro y lo que me gusta verlo, me parece precioso el cartel. A diferencia de los carteles decimonónicos que se suelen hacer (baste el cartel oficial de estas fiestas de primavera nuestras), es una composición preciosa de la realidad del mundo en la silueta de la cara del Cristo. Muy, muy bonito.
ResponderEliminarUn abrazo.
Triana, y ya está.
ResponderEliminarComo olvidar tan bella imagen, imposible,hermoso cartel,mi corazón
ResponderEliminarya está.
Un cordial saludo.
El cartel, magnífico.
ResponderEliminarLa causa, laudable.
Gracias Opinador. Coincido contigo. La verdad es que esta ha sido la entrada más rápida que hecho desde que tengo el blog. He estado un tanto apurado de tiempo durante los últimos días y no he podido siquiera presentar ni comentar el cartel. Para mi gusto es muy original y rompe con el estereotipo religioso que se utiliza en Sevilla.
ResponderEliminarUn abrazo.
Roble, Así es Triana. Ambos lo sabemos desde nuestro exilio.
ResponderEliminarUn abrazo
América, la imagen del Cachorro es un prodigio del Barroco español, pero, visto así, sugiere muchísimo más: la religiosidad y la realidad unidas.
ResponderEliminarUn beso grandote
Coincidimos, Alejandro.
ResponderEliminar¿No si se ha notado de que soy hermano del Cachorro?
Un abrazo