Después de casi 14 años con mi perra Luna, hoy, viendo que el cáncer la mataba, he decidido sacrificarla yo antes. Creo que ella lo hubiera hecho también por mí.
Le he dado su última salchicha y después la he llevado a la veterinaria.
Tenía pensado hablar de otra cosa pero no es el mejor día para mí.
A mi perra le dedicaré próximamente una entrada o dos, se las merece, pero antes aquí va en su honor un poema del sevillano Francisco Guerrero (1528 - 1599) . Imagino que en la isla de Canora habrá algún sitio para ella. Ya me lo gestionará Jesús Cotta.
Prado verde y florido
Prado verde y florido, fuente clara,
alegres arboledas y sombrías;
pues veis las penas mías cada hora,
contadlas blandamente a mi pastora;
que, si conmigo es dura,
quizá la ablandará vuestra frescura.
El fresco y manso viento que os alegra
está de mis suspiros inflamado,
y, pues que os ha dañado hasta agora,
pedid vuestro remedio a mi pastora;
que, si conmigo es dura,
quizá la ablandará vuestra frescura.
Mira, no te conozco de nada, espero que perdones mi intrusión. Pero te entiendo muy bien porque yo hice lo mismo hará ahora unos 4 años con una perra anterior que tuve y se pasa fatal.
ResponderEliminarEs durísimo, pero también es seguro que les evitamos un sufrimiento que no tiene sentido alguno.
Y que van a correr como locas por algún prado no sé si de Canora o donde sea, eso también lo tengo muy claro. Que los perros van al cielo pero fijo. Y las perras más ;-)
Un abrazo, y si lloras, es normal. Aunque la gente no lo entienda.
Aurora
Un abrazo Miradme. Te lo digo de corazón.
ResponderEliminarCon cariño.
Yo también tuve que pasar por ese trance con mi perro Gringo, que me acompañó de los doce a los veinticuatro años, ahí es nada. Toda mi infancia y adolescencia, de un plumazo. Quien lo probó lo sabe. Y yo, que conocí a tu luna, sé bien por lo que estás pasando.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo.
Querido Miradmealmenos, ya estoy buscando poetas que, además de hacer versos, sepan hacer buenas salchichas. Los perros que van a Canora tienen gratis el pasaje. Si no pagaron los animales el pasaje para el arca de Noé, no vamos nosotros a enmendarle la plana. Además, tu perra, según me informan desde el barco, ha emitido unos ladridos simpáticos que le han valido por veintiocho mil hexámetros, así que si alguien tiene derecho a correr libre y feliz y deslumbrante por los prados inocentes de Canora, es ella. Ab imo pectore, Cotta
ResponderEliminarLo siento, Miradme:
ResponderEliminarHoy luna estará ladrándote desde su astro.
Gracias a todos por vuestro apoyo. Perdonadme también por demorarme en la respuesta. Si os digo la verdad, no he sido capaz de volver a esta entrada hasta ahora mismo.
ResponderEliminar-Máster, gracias por entrar y por apoyo que me has brindado.
-También a Javier y a Julio. sé que estáis ahí.
-Juan Antonio, desconocía la existencia de Gringo. Creo que lo que has dicho se identifica con mis sentimientos. No se trata de la muerte de un animal querido, sino de la desaparición de un periodo de tu vida que ha pasado "como un plumazo". años de recién casados, los hijos, personas que ya no están... Por arte de magia todo se te manifiesta todo a la vez.
-Jesús, no me resulta extraño que Luna ya ladre con hexámetros. En vida ya dominaba varias lenguas, incluido el sánscrito. Gracias por tus gestiones ante los poetas "salchicheros" y tus reivindicaciones históricas ante Noé. Sí señor.
Yo hice lo mismo con mi perro a los 16 años, y ya sabes, hay poco que decir
ResponderEliminarUn abrazo