Sé que no soy objetivo ni imparcial. También sé que la medida se hace para adecuar el horario laboral de los padres con el escolar además de obligar al profesorado a permanecer más tiempo en su lugar de trabajo. En cualquier caso, ¿tiene sentido que un niño de 11 ó 12 años (insisto niño) tenga un horario escolar de 8.15h a 14.45h?
Si hacemos cuentas, son 6 horas y media de estancia diaria en el centro. Si a ello se le suma una media de 2 horas y media estudiando y haciendo deberes, resulta que coincide con el horario laboral de los padres. ¡Un acierto, sí señor!
¿Quién es capaz de mantener un adecuado grado de atención 8 horas al día durante 9 meses? En mi caso, ni estudiando oposiciones, llegué a ese extremo.
¿Qué piensan, pues, en la Consejería de Educación tantos expertos educativos-pedagógicos-políticos-cutres? ¿Para qué vale la autonomía del centro, de qué sirve tanto curso, tanto CEP si a la postre un trepa político (que no tiene ni idea de educación ni le interesa) hace lo que se le venga en gana?
Yo tampoco soy objetivo ni imparcial, pero a estos cabrones les importa una mierda la educación de nuestros hijos. Perdón por el vocabulario, pero no encuentro sinónimos.
ResponderEliminarUn abrazo.
¿Y qué esperas Miradme?
ResponderEliminarSi son capullos...
Capullitos sin florecer, Javi
ResponderEliminarEso deberiamos hacer : poner piedrecitas en el zapato de estos politiqueros , el tema Educación no es rentable ... no conviene un pueblo instruido ... se necesitan corderitos mansos ... menos mal que las ideas no se matan ...
ResponderEliminarAbrazos revolucionarios !!!
Feliz fin de semana
Rosna
Cuánta razón, Miradme, en tus palabras. Lo que menos importan son los niños: ellos no votan. Y a los maestros -funcionarios, en su mayoría- que les jodan: eso da votos.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo.