Llegando a los mercados de Fenicia...
Ya nadie conoce a nadie.Cada uno a lo suyo...y sí ahí vivimos...¿como ha dicho usted?..."un océano de indiferencia" Exacto.AnónimoE
Edgar Morin dijo “navegamos en un mar de incertidumbre, entre islas de certezas”. Un abrazo, gracias por visitarme de nuevo.
Tremenda imagen.Un abrazo...,Alonso.
Todos pensamos lo mismo, pero nadie cambia. Hazín es la vida, amada Anónima E.Un beso
Virgi, es un placer visitarte y por supuesto aprender de ti,Un beso
Gracias, Fernando,
Sencillamente genial (y precioso)un saludito saladicoglup!
Cual Don Quijote, la realidad se vuelve más profunda ante el poder desbordante de la imaginación.Un abrazo amigo,Rubén.
Ya nadie conoce a nadie.Cada uno a lo suyo...y sí ahí vivimos...¿como ha dicho usted?..."un océano de indiferencia" Exacto.AnónimoE
ResponderEliminarEdgar Morin dijo “navegamos en un mar de incertidumbre, entre islas de certezas”.
ResponderEliminarUn abrazo, gracias por visitarme de nuevo.
Tremenda imagen.
ResponderEliminarUn abrazo...,Alonso.
Todos pensamos lo mismo, pero nadie cambia. Hazín es la vida, amada Anónima E.
ResponderEliminarUn beso
Virgi, es un placer visitarte y por supuesto aprender de ti,
ResponderEliminarUn beso
Gracias, Fernando,
ResponderEliminarSencillamente genial (y precioso)
ResponderEliminarun saludito saladico
glup!
Cual Don Quijote, la realidad se vuelve más profunda ante el poder desbordante de la imaginación.
ResponderEliminarUn abrazo amigo,
Rubén.